Se quiera reconocer o no el raid es la disciplina que más prestigio da a la equitación española a nivel mundial, seguida, a distancia, por la doma clásica. Y una muestra más de este deporte sacrificado, que solo necesita el reconocimiento de los familiares y amigos, pero que da a la Federación Hípica Española medallas en los mundiales, es el bronce del equipo español juvenil que acaban de conquistar en la población, cercana a Lourdes, de Tarbes, en Francia. Y no importa que un caballo titular se lesione. Da lo mismo, a nadie se le caen los anillos y los que en teoría eran titulares ayudan en las asistencias a los que en principio eran reservas. Esto es espíritu de equipo. Y el que quiera entender, que entienda. Agda Muixi con ‘Ourasi de Cassa’; Cristina Yebra, montando a ‘Calzadilla’, e Ivet Pi, haciendo binomio con ‘Pinkfloid, que reemplazó a Raquel Busquet por lesión de su caballo ‘Chester de Graells’ –aunque Busquet se puso a disposición en la asistencia de Ivet Pi, dando una muestra de competitividad única-. Pues bien, los tres, con la ayuda de todo el equipo español, acabaron terceros en el Mundial de raid, consiguiendo un merecido bronce en base al sacrificio de unos jinetes y un equipo que saben sacrificarse en la disciplina más exigente del mundo.[fblike style=”standard” showfaces=”false” width=”450″ verb=”like” font=”arial” locale=”es_ES”][fbshare type=”button”] [twitter style=”horizontal” float=”left” lang=”es”] [twitter_follow username=”https://twitter.com/infoecuestre” language=”es”] [tweetmeme]
